Contra la impunidad de ayer y de hoy.
Ni olvido ni perdón, a una verdad que sigue oculta.
Con dignidad marchamos para recordar.
20 de mayo de 2022
El próximo 20 de mayo, después de dos años de pandemia socio-sanitaria a consecuencia del coronavirus, los colectivos universitarios, nos encontraremos nuevamente de manera presencial movilizándonos, frente a un reclamo histórico de hace un cuarto de siglo de las Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos durante la dictadura militar en Uruguay (1973-1985).
En esta recorrida que hemos venido participando activamente y que para nuestro país ha significado y significa duelos por las pérdidas humanas y de derechos que hemos sufrido varias generaciones, el concurrir y ser parte de este acontecimiento denominado la Marcha del Silencio, es un hito histórico que debemos olvidar.
Implica que como ciudadanos comprometidos y éticamente responsables con la sociedad debemos seguir ejerciendo presión para que se esclarezcan las desapariciones y asesinatos impunes ocurridos no sólo en Uruguay, sino también en América del Sur, en el marco del Plan Cóndor, significan ir ejerciendo acciones de marchas y contramarchas, como medida contestaría a esa omisión, a ese olvido.
La marcha del silencio, es una marcha de resistencia y fortaleza, un grito de esperanza por la verdad y justicia que no se apagará hasta que estos dos principios éticos básicos de la humanidad se concreten.
Al decir de Hannah Arendt (972): “El inconveniente de mentir y engañar es que su eficacia depende completamente de una noción clara de la verdad que el mentiroso y el engañador desean ocultar”.